La gimnasia abdominal hipopresiva es un conjunto de ejercicios destinados tanto para la recuperación del tono muscular del abdomen, como del suelo pélvico. Este tipo de ejercicios consiste en la reprogramación de los músculos del abdomen y del suelo pélvico.
La idea original de la gimnasia abdominal hipopresiva es revertir los riesgos y el mal producido por el deterioro que sufre el suelo pélvico y las paredes abdominales durante el embarazo. Con aun así, también se ha convertido en un recurso terapéutico para tratar y prevenir disfunciones urológicas, digestivas y traumatológicas (posturales).
Como actividad deportiva, es ideal para modelar la silueta, tonificar la pared abdominal, la corrección postural y el incremento de la resistencia respiratoria a la fatiga.
Beneficios de la gimnasia abdominal hipopresiva
La gimnasia abdominal hipopresiva cuenta con grandes beneficios para la fortaleza y bienestar del organismo. Mencionamos algunos de ellos:
- Mejora y soluciona los problemas de incontinencia urinaria.
- Alivia los dolores presentes en las relaciones sexuales.
- Mejora los problemas ocasionados por prolapsos y lumbagos.
- Previene que el suelo pélvico se debilite.
- Ayuda en la recuperación del post parto.
- Aporta mejoras en cuanto a la estética, la postura y funciones.
- Regula la respiración.
- Previene la aparición de las hernias, tanto el abdomen como en la vagina.
- Reduce el riesgo de presentar problemas de pesadez y edemas en piernas.
- Minimiza la posibilidad de lesiones articulares y musculares.
¿Cómo hacer los ejercicios abdominales hipopresivos?
Para empezar a practicar con ejercicios de corrección postural, lo ideal es que consultes a tu fisioterapeuta en Girona y sigas sus indicaciones. Para ir practicando la corrección de la postura, tienes que hacer lo siguiente:
- Lleva tu centro de gravedad hacia adelante.
- Estira la espalda hacia arriba hasta lograr la extensión de los músculos.
- Realiza movimiento de hombros hacia atrás hasta que juntes las paletillas lo máximo que puedas.
Si es la primera vez que empiezas a hacer estos ejercicios, el más recomendable es que los inicies tumbado/da. También puedes probar sentado/da, pero tienes que tener en cuenta que la espalda tiene que estar tan recta como sea posible.